jueves, 30 de noviembre de 2023

DICIEMBRE, EL MES MÁS BONITO DEL AÑO.


DICIEMBRE
Para la gran mayoría de nosotros, este mes es el más bonito del año, representa un tiempo de reflexión, de paz interior, de regalos, de celebraciones, de compras...
Para los que profesamos el catolicismo, celebramos en esta fecha, el nacimiento del niño Jesús, el hijo de Dios, quien viene a cuidarnos de todo mal.

En Venezuela, todos los niños y una buena parte de adultos (donde me incluyo), esperamos con emoción los regalos del Día de Navidad que nos trae el Niño Jesús, es una vieja tradición que se transmite a lo largo de generaciones, los niños elaboran la carta al Niño Jesús, donde hacen sus peticiones y describen que sus conductas han sido merecedoras de estos regalos. La carta es dejada en el Árbol de Navidad hasta el 24 de diciembre, la mañana del 25,  los regalos son entregados a los peques, es un verdadero placer participar de la alegría de los niños al abrir sus regalos.
También es tradición en Venezuela la colocación del pesebre, nacimiento o belén, en cada casa o institución, se recrea el nacimiento del niño Jesús, con los personajes de la época, como son: el niño Jesús, San José y la Virgen, la mula, el buey, el ángel, los pastores, las ovejas y otros.

Este mes también se caracteriza por su gastronomía típica, tales como la famosa y exquisita hallaca venezolana, plato que nos recuerda siempre que estamos en Navidad, y que reúne a toda la familia en su elaboración, cada uno de nosotros piensa que la hallaca de su mamá es la mejor. Se unen a la mesa, la ensalada de gallina, el pernil, el jamón planchado, el pavo, el pan de jamón, y si de postres hablamos tenemos la torta negra, el dulce de lechosa, el dulce de cabello de ángel, las nueces, las pasas y en los últimos años por influencia de países como España e Italia, contamos con los turrones y el panettone, en fin se trata de una fiesta de sabores, colores y aromas que definen a la Navidad Venezolana.
Para animar todo esto, tenemos nuestra propia música de la época decembrina, La Gaita Zuliana, un ritmo bailable lleno de emociones que hace brotar las lágrimas a más de uno, los villancicos y aguinaldos completan el ambiente musical.

En Caracas, el inicio de la Navidad, lo marca tradicionalmente el encendido de la Cruz del Cerro Guarairarepano, mejor conocido como Cerro El Ávila, hermosas montañas que contemplan la ciudad a sus pies y que es un referente de todo caraqueño. Contamos  también con el encendido del árbol de navidad de la plaza Francia de Altamira, que en los últimos años se ha convertido en un símbolo de la ciudad.

Diciembre, es la época del año donde nos reencontramos con la familia y amigos, donde lloramos a nuestros muertos, donde echamos en falta nuestros afectos, donde la tierra nos llama, nuestras raíces brotan y nos recuerdan lo que somos y de donde venimos, donde los sentimientos se colocan a flor de piel (muchas veces se desbordan), donde nos revisamos, donde nos cuestionamos, donde perdonamos y rogamos por un perdón, donde necesitamos un abrazo y una cara familiar, donde sentimos la soledad (solos o acompañados), donde pensamos en los que dejamos atrás, en lo que tenemos, en el futuro, en fin,  donde nos permitimos ser seres humanos.

Ahora bien, el mes de diciembre, también tiene una cara amarga, tiene una cruz, un aspecto que nos duele, pero que es una realidad, cada año pese a las campañas de concientización y prevención, seguimos observando un buen número de niños víctimas del uso de los juegos pirotécnicos o fuegos artificiales, niños quemados, mutilados, heridos, bajo la mirada irresponsable y complaciente de sus padres y adultos significativos, quienes no sólo le facilitan el dinero para su compra, sino que les refuerzan su uso, los niños no deben manipular estos artefactos por más inocuo que parezca.
Otro flagelo que se incrementa es estos días son los accidentes de tránsito, la delincuencia, el consumo de alcohol y otras drogas no lícitas, los embarazos no deseados, el maltrato intrafamiliar, de género e infantil.

Este año al igual que estos últimos,  será además difícil para muchos venezolanos, ya que debido a la diáspora de migrantes que han dejado el país en busca de mejores condiciones de vida, en muchos hogares venezolanos quedarán puestos vacíos en la mesa durante la cena de noche buena y de noche vieja, muchas madres y padres estarán "huérfanos de hijos".

Toca adaptarse, reinventarse, integrarse y mantener vivos esos lazos afectivos y apego por la familia y por lo nuestro.

Pese a lo anterior La Navidad es la mejor época del año, tratemos de disfrutarla con los que quedan, con los seres queridos, con los amigos, con una actitud positiva, con el alma, el cerebro y el corazón, desde el lugar del mundo donde nos encontremos.
Con la esperanza de un futuro mejor para Venezuela.

Desde este blog, y desde Canarias, les deseo a todos,  una FELIZ NAVIDAD 2023

Dr Eduardo Hernández G.
Pediatra-Terapeuta de la Conducta Infantil
IG @dr.eduardo.pediatra y @terapiadelaconductainfantil